En los medios de comunicación convencionales se han difundido mucho algunos de los aspectos más llamativos del sexo tántrico –como la posibilidad de que los hombres tengan orgasmos sin eyacular o que tengan varios orgasmos en un mismo encuentro sexual- pero el Tantra es mucho más que eso. De hecho, se parece mucho más al yoga o a la meditación que a un conjunto de ejercicios y posturas para tener mejor sexo. Sigue leyendo